¿Quién no ha sentido alguna vez la sensación de nerviosismo, inseguridad o temor? El ritmo de vida actual un tanto acelerado, aunado a la soledad y a la falta de conocimiento respecto a lo que sentimos, provoca que la ansiedad comience a ser una especie de “normalidad” en la vida diaria. Sin embargo, la ansiedad no es una buena compañera, a la larga puede causar severos trastornos si no se atiende a tiempo.
Aquí te proponemos algunos remedios naturales para controlar y entender la ansiedad, te recomendamos que los leas y apliques o que se los recomiendes a alguien que sientas que está ansioso, de manera que no permitas que esta emoción se convierta en algo patológico.
¿Qué es la ansiedad?
La ansiedad es una emoción. Y así como el miedo, el enojo o la tristeza, la ansiedad no es algo malo, sólo es una respuesta adaptativa que se caracteriza por un incremento de las facultades perceptivas ante una necesidad, ya sea fisiológica del organismo, como el hambre cuando falta algún elemento importante en el cuerpo que en esos momentos se encuentra por debajo del nivel adecuado, o ante la necesidad afectiva, como el temor de perder o sentir que no se puede conseguir ya sea reconocimiento, o un bien preciado, o amor.
En realidad la ansiedad, como todas las emociones, tiene una función importante en el organismo, todas las emociones están relacionadas con la supervivencia y la adaptación del individuo. Sin embargo, la ansiedad se vuelve algo patológico o fuera de la armonía natural del cuerpo cuando comienza a resultar una respuesta crónica, destructiva y no adaptativa para el individuo. Cuando la ansiedad empieza a convertirse en algo fuera de control en una persona, esta pudiera experimentar los siguientes síntomas:
Síntomas:
• Estrés general: el cual aparece cuando se quiere vivir por encima de las posibilidades económicas, uno se carga de deudas o trabaja más de lo necesario, o utiliza su tiempo libres en actividades estresantes o competitivas como los juegos de apuestas.
• Sudor y temblor.
• Palpitaciones.
• Posible insomnio.
• Irritabilidad, agitación y miedo; carácter sensible al enfado y la ira si la ansiedad se agudiza.
• Ganas de llorar sin motivo alguno.
• Desinterés, cuando la ansiedad va asociada a cansancio o después de momentos de grandes tensiones emotivas.
• Podrían aparecer síntomas como nauseas, micción muy frecuente, sofocos, dilatación de la pupila y jadeo cuando la ansiedad es extrema.
• Dispersión, falta de concentración.
• Hiperactividad.
• Sensación de ahogo, de pérdida de control o del conocimiento.
• Transpiración exagerada.
• Rigidez muscular, que aparece cuando se trabaja en exceso y con nerviosismo por no llegar, por ejemplo, a algún lugar, o por querer terminar rápido, o no creer que se va a terminar un trabajo importante, etcétera, es que los músculos se cargan de tensión excesiva.
• Dificultades para la comunicación, pensamientos negativos y obsesivos.
Pero todos estos síntomas pueden suavizarse e incluso desparecer con sencillos y efectivos tratamientos que se conocen desde hace miles de años. Y, como ya se sabe, la naturaleza siempre tiene el remedio más sabio para cualquier afección, dolor o malestar. Y la ansiedad no es una excepción.
Remedios
La medicina alópata trata la ansiedad con ansiolíticos, somníferos, y otros fármacos que a decir verdad tienen efectos secundarios, debilitan el sistema inmunológico, crean dependencia y muchas tan solo adormecen los síntomas sin en verdad eliminar la causa real.
Aquí te damos algunas hierbas para combatir la ansiedad y el estrés. Hay algunas de ellas que puedes utilizar como lo recomienda la aromaterapia, ya sea en difusor o como aceite esencial para preparar aceites o cremas y dar masajes. Si vas a utilizar aceites esenciales, cerciórate de no aplicarlos nunca directamente sobre la piel, ojos ni ingerirlos. Hay que rebajarlos ya sea con agua, aceite para masaje, alguna crema, etcétera.
Aceites esenciales y remedios naturales para combatir la ansiedad
Toronjil; es una de las plantas número uno para combatir los estado nervioso alterados. También se conoce como cidronella abejera, hierba luisa, hierba bergamota, torongina y melisa. El agua del Carmen (un agua elaborada por las carmelitas francesas) es empleada exitosamente contra la ansiedad. Está elaborada con las prodigiosas propiedades curativas del toronjil, las cuales se encuentran en las flores y en las hojas, las cuales se desecan a la sombra, en un lugar fresco y alejado de polvo. Puedes encontrar el toronjil en aceite esencial, y usarlo en el difusor, en la bañera o para darte un delicioso masaje.
Se utiliza desde hace mucho tiempo en forma de infusión, tintura, vino medicinal o agua antihistérica, con la cual se combaten trastornos de origen nervioso, hepático, neurálgico y del aparato digestivo, así como para calmar la ansiedad. La melisa es antiespasmódica, digestiva y ayuda a relajar el sistema nervioso de una forma positiva, sin adormecer, calmando y elevando el ánimo. Los griegos utilizaban esta plantita para reforzar el corazón y el cerebro, y disipar afecciones físicas y anímicas.
Geranio: este aceite esencial es antidepresivo, ayuda a suavizar emociones y a causar un estado de paz para poder reflexionar claramente.
El anís, la amapola, el kaki, la lavanda, también son eficientes a la hora de armonizar el estado anímico. Cualquiera de estas hierbas puedes usarlas en incienso o con usos en aromaterapia.
Manzanilla y menta: la manzanilla tiene excelentes propiedades relajantes, ideal para calmar los nervios, al igual que la menta y la tintura de anís. Un te de manzanilla o de menta antes de ir a la cama o en ayunas, es efectivo para ayudar a relajarse. También puedes elaborar un litro de agua con una infusión de agua de manzanilla, y beberla durante el día, a pequeños tragos.
Otras alternativas:
• Utiliza en tu dieta alimentos de calidad, frescos, que abastezcan al organismo de la energía que necesita y sobre todo de las vitaminas y los minerales deficitarios, de manera que se le devuelva al organismo el equilibrio eliminando o reduciendo los síntomas de la ansiedad.
• Evitar el azúcar blanca en todo sentido: se ha comprobado en los hospitales psiquiátricos que el azúcar blanca es uno de los primeros causantes de las enfermedades y padecimientos mentales. Evita refrescos, dulces, pasteles, etcétera.
• Fitoterapia: el de de tila, (una infusión después de las comidas), la pasiflora ( de 2 a 4 comprimidos diarios) o el hipérico (de 2 a 4 cápsulas diarias), son buenos para combatir la ansiedad.
• El Reiki, la practica del yoga o el tai chi, la reflexología, la acupuntura y la medicina bioenergética son muy buenas opciones.