¿Te has puesto a pensar por qué consumes lo que consumes? ¿De verdad crees que todo lo que compras es absolutamente necesario para ti? ¿Te gustaría encontrar una manera de ayudar al mundo y cuidar tu presupuesto?
Vivimos en un modelo de hiperconsumo en el que las grandes marcas y bancos a nivel internacional nos manipulan para consumir cosas que en realidad no son tan necesarias como creemos. Emile Henri Gauvreay dice: “Hemos construido un sistema que nos persuade a gastar dinero que no tenemos en cosas que no necesitamos para crear impresiones que no durarán en personas que no nos importan”.
Para romper con este esquema de consumo, en Freelenial proponemos un estilo de vida de reduccionismo, que significa consumir de manera mucho más consciente, buscando reducir lo que compramos para cuidar el medio ambiente y alcanzar más rápido la libertad financiera.
Al hacer consciencia de la situación actual, podrás darte cuenta que el consumo excesivo no genera ningún beneficio al mundo. Así que para hacerle frente, el reduccionismo busca disminuir el consumo de dos tipos de productos: bienes materiales y servicios, y alimentos de origen animal.
¿Me conviene aplicar el reduccionismo en productos?
Tienes 3 grandes motivos para reducir el consumo de tus bienes y servicios:
- Te hace más libre. Si compras muchos productos, no tendrás dinero para invertir; si no puedes invertir, no podrás alcanzar la libertad financiera, y si no la tienes, no podrás dedicar tu tiempo a hacer las cosas que más valoras.
- Cuidas el medio ambiente. El consumo en exceso daña al medio ambiente y es una de las principales causas del deterioro de nuestro planeta.
- No fomentas la desigualdad. El consumo en exceso genera más desigualdad en la sociedad, y la desigualdad genera divisiones, recelos e inclusive inseguridad y violencia. Una sociedad menos consumista produce un mundo menos resentido.
¿Qué es ser reduccionista en mi alimentación?
Aplicar el reduccionismo en tu alimentación consiste en consumir menos productos de origen animal, que son los que provocan el mayor impacto al medio ambiente.
Sin entrar al terreno del veganismo o vegetarianismo, el reduccionismo abarca a todas las personas que conscientemente han disminuido su consumo de carne, incluyendo a vegetarianos, veganos, flexitarianos y cualquier persona que decida comer menos de este tipo de alimentos.
Si todavía tienes dudas de seguir este estilo de vida, te comparto 3 razones que te ayudarán a decidirte a seguir el reduccionismo:
- Mejora tu salud. El consumo exagerado de alimentos de origen animal ocasiona diabetes, colesterol y enfermedades cardiovasculares; incluso, la OMS publicó en 2015 que la ingesta de carne aumenta el riesgo de cáncer, por lo que es vital consumir una alimentación balanceada que incluya todos los nutrientes que necesitas.
- Cuidas el planeta. El consumo de alimentos de origen animal es la principal causa de deterioro al ambiente. Actualmente alrededor de 70% de los granos que se producen se destinan a la ganadería, actividad que emite grandes cantidades de gases de efecto invernadero en nuestro planeta (las heces del ganado producen gases y se sacrifican cerca de 70 mil millones de animales al año). Además, cuando consumes alimentos de origen animal no solo estás contribuyendo a la deforestación de los bosques (para siembra de granos o ganadería extensiva) y al calentamiento global, sino que también estás contribuyendo a la destrucción de ecosistemas y extinción de especies.
- Respetas a los animales. Los animales sienten y muchos son sacrificados sin sentido por el consumo excesivo. Al seguir el reduccionismo, evitas que se generen más rastros y no contribuyes al sufrimiento de miles de seres vivos.
El reduccionismo nos incluye a todos
Para llamarte reduccionista solo tienes que disminuir tu consumo en productos y alimentos de origen animal al ritmo que sea el adecuado para ti.
Es decir, si eres de las personas que le gustaba tener 20 pares de zapatos y ahora solo tienes 10, estás siguiendo la filosofía del reduccionismo; si antes comías carne los 7 días de la semana y ahora solo lo haces 5 días, eres reduccionista.
Cualquier persona que reduzca su consumo habitual (aunque sea un poco) está siguiendo esta filosofía.
Como ves, este movimiento que promueve la inclusión aplaude los esfuerzos por reducir el consumo en cualquier medida, ya que genera las mejores condiciones para lograr la libertad financiera y cuidar nuestro planeta. ¿Cómo podrías hoy aplicar el reduccionismo?
